¿Qué son las hemorroides y cómo se controlan?

¿Alguna vez has sentido comezón en el ano? ¿O has presentado sangrado? Es muy posible que estés viviendo una situación de hemorroides. Aquí te explicaré, más a fondo, sobre este tema y el cómo controlarlo.

¿Por qué se originan las hemorroides?

Las hemorroides, también conocidas como almorranas, son las venas que tenemos en el canal anal que ayudan a mantener todo en su sitio. Piensa en ellas como pequeñas válvulas que contribuyen al control de la continencia fecal, esa capacidad de mantener todo bajo control hasta que llega el momento adecuado. De hecho, estas venas son responsables del 5% de esa importante función, aunque nunca te hayas dado cuenta de su existencia hasta que empiezan a causar problemas.

No todos experimentan problemas con las hemorroides, pero cuando las cosas se complican, se convierte en lo que llamamos «enfermedad hemorroidal.» En los Estados Unidos, aproximadamente 10 millones de personas pueden experimentar este problema. Entonces, ¿cómo pasas de tener hemorroides normales a desarrollar enfermedad hemorroidal? La respuesta tiene que ver con la presión y el esfuerzo.

Una de las causas más comunes es el estreñimiento, que provoca un esfuerzo innecesario al ir al baño. Cuando tienes que hacer mucho esfuerzo para defecar, estas venas en el canal anal comienzan a inflamarse y, en algunos casos, a sobresalir, lo que puede ser muy incómodo. También se puede originar por cargar objetos pesados o incluso por estar sentado durante mucho tiempo, como en ciertos trabajos de oficina o de transporte.

La enfermedad hemorroidal puede manifestarse de diferentes maneras. En grados más leves, pueden experimentar picazón, comezón o un leve sangrado. Pero a medida que avanza, pueden aparecer sensaciones de un cuerpo extraño o pequeñas protuberancias que parecen «bolitas.» Y en los grados más severos, como el 3 o el 4, estas protuberancias pueden sobresalir del canal anal, causando mayor sangrado y molestias.

El dolor generalmente indica que algo más está sucediendo, como una complicación. Si sientes dolor, es probable que las hemorroides estén irritadas o afectadas por alguna enfermedad hemorroidal más avanzada.

¿Cuánto tiempo duran las hemorroides?

El tema de las hemorroides es un poco incómodo de abordar, pero es importante hablar sobre cuánto tiempo duran para entender el proceso y saber qué esperar. Las hemorroides, esas venas hinchadas en el canal anal que pueden causar bastante incomodidad, tienen un tiempo de vida variable. No hay una respuesta universal porque dependen de varios factores, como la gravedad de la afección y el tipo de hemorroides que tienes.

Primero, es crucial saber que las hemorroides pueden ser internas o externas. Las internas están dentro del canal anal y, en muchos casos, ni siquiera las sientes, pero pueden causar sangrado durante la defecación. Las externas, por otro lado, están en el borde del ano y pueden ser dolorosas o causar picazón. Este tipo de hemorroides tiende a ser más visible y palpable, y puede ser más molesto cuando se inflama.

El tiempo que duran las hemorroides varía dependiendo de la causa subyacente. Por ejemplo, si la presión sobre el canal anal proviene de una actividad temporal, como un esfuerzo excesivo al levantar algo pesado, las hemorroides podrían desaparecer en cuestión de días o semanas. Pero si la causa es algo crónico, como el estreñimiento prolongado, podrían durar mucho más tiempo, incluso volverse un problema recurrente.

En los casos más leves, las hemorroides pueden desinflamarse y desaparecer por sí solas después de un tiempo, sin necesidad de intervención médica. En otros casos, especialmente cuando hay un factor constante que las irrita, podrían persistir y necesitar tratamiento para reducir la inflamación o la irritación.

Hay momentos en los que las hemorroides pueden complicarse, como cuando se trombosan. En este caso, el dolor puede ser agudo y requerir asistencia médica. Estas complicaciones afectan cuánto tiempo duran las hemorroides y pueden extender su duración.

¿Qué puedo hacer para eliminar las hemorroides?

Cuando las hemorroides se presentan, pueden ser un dolor de cabeza, o más bien, un dolor en otra parte menos agradable. Pero no todo está perdido, porque hay maneras de eliminarlas y aliviar ese incómodo malestar. 

Para determinar la mejor estrategia, lo primero que debes hacer es saber en qué grado están tus hemorroides. Una vez que lo tengas claro, podrás abordar el problema con el enfoque correcto.

En grados 1 y 2, generalmente puedes controlar las hemorroides con cambios en tu estilo de vida y en tu dieta. Si el estreñimiento es el culpable, aumentar la cantidad de fibra que consumes puede ayudar mucho. Piensa en frutas, verduras y cereales integrales. Estos alimentos harán que las heces sean más blandas, lo cual reduce el esfuerzo al momento de ir al baño. También es importante beber suficiente agua, porque el cuerpo necesita mantenerse bien hidratado para que todo fluya, por así decirlo.

Además de la dieta, es esencial eliminar o al menos reducir los factores que causan presión excesiva en el canal anal. Si estás levantando objetos pesados regularmente, como en un trabajo manual, trata de encontrar maneras de reducir esa carga. Las sentadillas profundas también pueden contribuir al problema, así que podrías considerar cambiar tu rutina de ejercicios por algo menos intenso.

Ahora, cuando llegamos a los grados 3 y 4, las hemorroides ya están en otro nivel, y las soluciones caseras pueden no ser suficientes. Aquí es donde entra el terreno de los procedimientos médicos. El «banding», que consiste en ligar las hemorroides para que se sequen y caigan, es un enfoque común. Otra opción es la cirugía, pero eso puede sonar un poco aterrador para algunos. La cirugía con láser, por otro lado, es una alternativa más moderna y generalmente implica menos tiempo de operación y una recuperación más rápida. Así que, si tienes hemorroides de alto grado, hablar con un especialista sobre la cirugía láser podría ser la mejor opción.

¿Qué doctor puede ayudarme en Reynosa con las hemorroides?

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Comencé mi carrera en la Universidad Autónoma de Nuevo León, donde me gradué como médico cirujano y partero. Luego, para perfeccionar sus habilidades en cirugía, continué mis estudios en la Universidad Autónoma de Guadalajara, obteniendo el título de cirujano general. Pero eso no fue suficiente. Mi pasión por ayudar a las personas con problemas del colon y recto me llevó a especializarme aún más, completando una formación en coloproctología en la Universidad de Guadalajara.

La coloproctología es una rama médica que se centra en el diagnóstico y tratamiento de enfermedades del colon, recto y ano, que incluye las hemorroides. Mi dedicación a esta especialidad es tal que he sido certificado por el Consejo Mexicano de Enfermedades del Colon y Recto A.C., una distinción que demuestra su experiencia y competencia en este campo.

Si te preocupa el tratamiento de tus hemorroides o cualquier otra condición relacionada con el colon o el recto, tengo la experiencia y el conocimiento para guiarte hacia una recuperación efectiva. Desde la evaluación inicial hasta el tratamiento y el seguimiento, me aseguraré de que recibas la mejor atención posible. Ya sea que necesites cambios en tu dieta, procedimientos médicos o incluso cirugía, estaré allí para acompañarte en cada paso del proceso.

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