¿Cómo identificar hemorroides externas correctamente?

¿Has tenido molestias en el ano? ¿Comezón y la aparición de heridas? Es posible que estés viviendo hemorroides, muy en específico hemorroides externas. Pero para eso aquí te diremos cómo identificarlas correctamente.

¿Qué son las hemorroides?

Las hemorroides son una condición que muchas personas experimentan en algún momento de su vida. 

Básicamente, se trata de venas hinchadas en la parte inferior del recto y el ano, similares a las venas varicosas que se pueden ver en las piernas. Estas venas pueden hincharse por diversas razones, como el esfuerzo al evacuar, el embarazo, o incluso por estar sentado durante períodos prolongados.

Cuando las venas se inflaman pueden causar una variedad de síntomas. Las hemorroides internas, que se encuentran dentro del recto, por lo general no se sienten ni se ven, pero pueden causar sangrado durante las evacuaciones. Por otro lado, las hemorroides externas, que se desarrollan bajo la piel alrededor del ano, pueden ser dolorosas, provocar picazón e incluso formar coágulos que aumentan la incomodidad.

El estilo de vida tiene un impacto significativo en la aparición y el manejo de las hemorroides. Una dieta baja en fibra y la falta de ejercicio pueden contribuir a su desarrollo, mientras que incorporar más alimentos ricos en fibra y mantener una buena hidratación puede ayudar a prevenirlas o aliviar los síntomas. 

En muchos casos, las hemorroides se pueden tratar en casa con cambios en la dieta, baños de asiento y cremas específicas. Sin embargo, cuando los síntomas persisten o empeoran, es crucial buscar atención médica.

Las hemorroides externas son venas hinchadas que se encuentran justo debajo de la piel alrededor del ano. A diferencia de las hemorroides internas, que están situadas dentro del recto y no suelen ser visibles ni dolorosas, las hemorroides externas son más notorias porque se desarrollan en una zona donde hay muchas terminaciones nerviosas. Esto significa que suelen causar molestias, picazón, dolor y, en algunos casos, sangrado.

El sangrado generalmente se presenta durante o después de una evacuación y puede ser visible en el papel higiénico o en las heces. Además, las hemorroides externas pueden sentirse como pequeños bultos alrededor del ano, y en situaciones donde se forma un coágulo de sangre en ellas, conocido como trombosis, pueden volverse particularmente dolorosas y sensibles al tacto.

¿Cómo identificar hemorroides externas correctamente?

Identificar hemorroides externas puede ser un proceso un tanto incómodo, pero es esencial para poder abordar el problema de manera adecuada. 

El primer indicio de que podrías estar lidiando con hemorroides externas es la presencia de un bulto o hinchazón en la zona anal. Esta protuberancia suele ser sensible al tacto y puede causar molestias, especialmente al sentarse o durante la evacuación. 

Otro síntoma común es el dolor, que varía en intensidad dependiendo del tamaño de la hemorroide y de si se ha formado un coágulo en su interior, lo que se conoce como trombosis hemorroidal. Si notas una sensación de ardor, picazón o incluso dolor agudo al realizar ciertas actividades, es posible que estés lidiando con hemorroides externas.

Además del dolor y la hinchazón, algunas personas pueden experimentar sangrado, especialmente después de evacuar. Este sangrado suele ser de color rojo brillante y puede aparecer en el papel higiénico o en la superficie de las heces. Aunque el sangrado puede ser alarmante, generalmente no es abundante, pero es una señal clara de que es momento de prestar atención a la salud anal.

Es importante destacar que estos síntomas pueden variar de una persona a otra y que, en algunos casos, las hemorroides externas pueden no causar ningún síntoma notable. Si sientes alguna molestia persistente o descubres un bulto inusual en el área anal, es recomendable consultar a un especialista. Un diagnóstico adecuado permitirá descartar otras posibles afecciones y determinar el mejor tratamiento para aliviar el malestar. Ignorar las hemorroides externas puede llevar a complicaciones, por lo que actuar a tiempo es fundamental para tu bienestar.

¿Cómo curar las hemorroides?

Curar las hemorroides es una meta que muchas personas buscan cuando enfrentan la incomodidad que estas provocan. Aunque son comunes y no suelen ser graves, pueden causar bastante malestar. La buena noticia es que existen varias maneras de tratarlas y, en muchos casos, se pueden aliviar desde la comodidad del hogar.

Uno de los primeros pasos para curar las hemorroides es hacer algunos cambios en el estilo de vida. Incorporar más fibra en la dieta, por ejemplo, puede ayudar a suavizar las heces y reducir la tensión durante las evacuaciones, lo que es clave para evitar agravar las hemorroides. Beber suficiente agua también juega un papel crucial, ya que ayuda a mantener las heces blandas y facilita el proceso digestivo.

El alivio tópico es otra opción popular para tratar las hemorroides. Existen diversas cremas y ungüentos de venta libre que están diseñados para reducir la inflamación y aliviar la picazón y el dolor. Estos productos suelen contener ingredientes como hidrocortisona o lidocaína, que proporcionan un alivio temporal. Además, los baños de asiento, que consisten en sumergir la zona afectada en agua tibia durante 15 a 20 minutos varias veces al día, pueden reducir el dolor y la hinchazón.

En algunos casos, las hemorroides no responden a los tratamientos caseros, y es entonces cuando se debe considerar la intervención médica. Existen procedimientos mínimamente invasivos, como la ligadura con banda elástica, que pueden ser efectivos para eliminar las hemorroides persistentes. En situaciones más severas, la cirugía puede ser necesaria, aunque estos casos son menos comunes.

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